IBAGUÉ. El sábado en la tarde, luego de permanecer varios días hospitalizada, el corazón de Gilma Jiménez, del que la principal motivación de sus latidos era la sonrisa de los chiquillos, se detuvo. La senadora por el Partido Verde fue la principal promotora del referendo de cadena perpetua para los autores de crímenes contra menores de edad en Colombia, que no pasó en la Corte Constitucional.
Su vida política comenzó en el Concejo de Bogotá, y en 2010 llegó al Senado de la República. Desde allí promovió la iniciativa que pretende dar un castigo severo y ejemplar a los delincuentes que abusen de la inocencia infantil, pese a que no fue aprobada en última instancia. Su lucha, a la que le dedicó gran parte de su vida política, fue el bienestar y garantizar los derechos de los niños y niñas, por lo que fue considerada como el ángel de los pequeños.
Sus hijas, Bibiana y Yohanna Salamanca Jiménez, agradecieron a los distintos sectores sociales que se vincularon y sintieron identificados con la noble causa por la que su progenitora luchó hasta el último momento, por el acompañamiento en estos duros momentos. También reiteraron que las políticas abanderadas por la senadora en favor de los niños, deben continuar:
“Hoy queremos recordar lo que ella siempre soñó a través de su incansable, permanente y coherente lucha: Los niños son el máximo capital social y humano de una sociedad que se precie de ser civilizada y moralmente correcta. Los niños y su felicidad, así como la garantía plena de sus derechos, son un asunto de Estado y el día que logremos el pleno respeto de sus derechos esta sociedad verdaderamente cambiará”, dijeron a través de la página Web de la líder política y social.
Gilma, en frases
Esta redacción dialogó en varias oportunidades con la senadora Jiménez sobre hechos relacionados con menores de edad en el Tolima. Estas son algunas de las frases de batalla para generar conciencia entre la sociedad sobre los delitos cometidos contra los menores:
* “Vamos a visibilizar a los niños desaparecidos. No puede ser que en este país se busque más a una mascota, que a un niño”.
* “No podemos repetir esa vergüenza que cometimos con los niños víctimas de Garavito. Se desaparecieron 150 menores, fueron asesinados, violados, y nunca nos dimos cuenta. Hoy lo sabemos porque él habló, no porque Colombia los haya buscado; eso es una vergüenza de sociedad”.
* “En este país es más grave si se roban un celular o si se pierde una mascota o desaparece un adulto, que si secuestran o desaparecen a un niño o niña. Jamás el País se ha paralizado por los más de 11 mil niños y niñas desaparecidos. Jamás se ha marchado por la violencia contra ellos, que son las mayores víctimas de las más aberrantes formas de violencia”.
* “No podemos escudarnos en el miedo, la indiferencia, la indolencia, porque eso los convierte automáticamente en cómplices de un delito de lesa humanidad”.
* “Aquí hay un abuelo y una abuela llorando una hija asesinada y una nieta desaparecida, una bebecita que cumplió un año en cautiverio desaparecida. Hoy Ibagué y el Tolima le están dando un ejemplo a Colombia”, dijo durante la marcha en Ibagué por la liberación de Angie Daniela Cuervo, en octubre de 2009.
* “Hoy, cuatro mil menores, entre ellos Angie Daniela, están desaparecidos o secuestrados, y todos debemos movilizarnos, autoridades y sociedad unidos, para encontrarlos”.
Comprometida con Angie Daniela
Desde agosto de 2009, Angie Daniela Cuervo, quien para ese entonces contaba con 11 meses de nacida, y desapareció luego de que su madre fuera asesinada cuando salieron de Venadillo a Ibagué, fue proclamada por Jiménez como el símbolo de los niños desaparecidos en Colombia, y se comprometió con su equipo de trabajo a luchar de forma inagotable para que se hiciera justicia, y así fue. Jhon Andrés Cuervo Aguirre, padre de Angie Daniela y medio hermano de Angie Tatiana Cuervo, progenitora de la chiquilla y asesinada en el sector de El Salado, fue condenado a 50 años de cárcel por el hecho. Desde las investigaciones hasta la captura del policía activo y posterior condena, Jiménez estuvo ahí vigilante, atenta por medio de sus colaboradores que le informaban todos los pormenores de las diligencias, como siempre lo hacía en los procesos judiciales contra quienes cometían todo tipo de aberraciones contra los niños: “Lo único que esperamos de esta captura es que se establezca con claridad quién asesinó a Angie Tatiana, y sepamos el paradero de Angie Danielita. Este hombre tiene que informar dónde está la niña. Recordemos que Danielita es el símbolo de los niños desaparecidos en el Referendo de Prisión Perpetua”, afirmó en noviembre de 2011, tras la captura de Cuervo Aguirre.